Somos aficionados a todo el mundo del motor y aunque esto del Panda Raid es nuestro primer proyecto desde luego no será el último, alguno de nuestros futuros proyectos llevan muchos años de trabajo y esperamos poder enseñároslo en breve.
Pablo y el servidor que escribe somos los que participaremos en Panda Raid pero esto no sería posible sin todos los amigos que nos rodean, Martin.G, Martin.F, Diego, Diego Fernández, Alberto, Carlos, Barrera, Óliver, Miriam, etc etc etc.
Bueno esta es nuestra primera publicación en este blog, entonces os vamos a contar un poco la historia de nuestro comienzo para Panda Raid.
¿Qué es Panda Raid?, pues Panda Raid es un rally amateur de larga distancia y resistencia que se celebra anualmente en marzo, donde más de un centenar de equipos deciden desafiar la suprema ley del sentido común y lanzarse a una aventura old school a bordo de un viejo Panda (o también Marbella). Se desarrolla en Marruecos a través de un recorrido de 7 etapas, que en algunos casos ponen a prueba las capacidades físicas y mentales de los equipos, valores supremos de un esfuerzo mecánico y de camaradas que pretende dejar atrás, al menos por unos días, el bullicio de la civilización y la dependencia de la tecnología. Lo importante no es el tiempo ni la velocidad; superar Panda Raid implica ante todo llegar a la meta.
Como sabréis los que nos conocéis, cuando leímos desafiar el sentido común y encima en una panda pues ala, ya la hemos liado, allá nos vamos.
Empezamos en busca de nuestro coche en enero de 2014 y a los pocos días de empezar nos aparece un Marbella en Paradela, un pueblo cerquita de Lugo, allá nos vamos mi hermano Óliver, mi amigo Pablo y yo a ver el que sería nuestro futuro coche.
Llegamos a Paradela, a una pequeña granja y allí nos esperaba Pepe con su Marbella en la entrada de la casa. El coche no es que estuviera en su mejor momento, algún que otro bollo, un faro roto y mierda, muuuucha mierdaaaaaaa, nuestro querido Pepe lo había usado en sus últimos tiempos para moverse por sus tierras con todo lo que eso conlleva.
La negociación fue dura, Pepe quería 600 euros pero nosotros no estábamos dispuestos a pagar esa cantidad y menos por el estado en el que estaba, lo más fácil hubiera sido marcharnos en busca de otro en mejor estado pero aquel pequeño Marbella tenía algo que nos estaba llamando, no se si era pena de verlo en ese estado o pensar en las que tubo que pasar en su vida. Entonces empezamos con una dura negociación que si 300 que si 400 que si 500...
Pepe nos invitó a un vino y unos chorizos mientras seguíamos la negociación, quizá pensando que así cederíamos pero ni mucho menos, después de probar aquellos chorizos que Pepe tanto alababa el precio quedo en 375 euros, una bolsa de chorizos y un vino de nuestra casa jejejeje
A los dos días llamamos a la grúa para que lo recogiera, llegamos, le pagamos a Pepe en metálico y en especias jajajaja y nos fuimos rápidamente ya que estábamos deseando empezar a trabajar en nuestro pequeño Marbella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario